Las investigaciones correctas dependen de Porqué correctos. Puedes entender un Porqué real si te das cuenta de esto: UN PORQUÉ REAL ABRE LA PUERTA A (CONDUCE A) UN MANEJO.

Si escribes un Porqué, hazte esta pregunta con respecto a él: “¿Abre la puerta a un manejo?”. ¿Conduce a o hace posible un manejo?

Si no lo hace, entonces es un Porqué incorrecto.

Cuando tienes un Porqué correcto, manejar lo que encontraste se vuelve sencillo. Entre más frustrado te vuelvas tratando de obtener una idea muy inteligente y astuta para manejar la situación, más probable será que tengas un Porqué incorrecto.

Así que si la solución para una situación no se visualiza fácilmente, entonces EL PORQUÉ NO HA ABIERTO LA PUERTA y es probablemente incorrecto.

Un Porqué correcto abre la puerta a la mejoría, permitiéndole a uno determinar un manejo que, si se realiza bien, logrará el escenario ideal. La Tecnología para la Investigación puede aplicarse a situaciones buenas o malas, grandes o pequeñas, resolviendo muchos de los enigmas de la vida y haciendo que las soluciones reales y funcionales sean posibles.